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Enfermedades

Existen varias clases de enfermedades relacionadas al contacto previo con las fibras del asbesto, y pueden categorizarse de varios modos:
Algunas, tales como la mesotelioma y el cáncer pulmonar son malignas (o cancerosas). Otras, tales como el asbestosis, las placas pleurales, la fibrosis pleural difusa, y las efusiones pleurales benignas, son benignas (no malignas o no cancerosas).

Algunas, como la mesotelioma, el asbestosis y el cáncer pulmonar, son progresiva y severamente debilitantes, a menudo conduciendo a la muerte; y otras, tales como las placas y engrosamientos pleurales son menos severas y rara vez producen síntomas o enfermedades.

Algunas, tales como la mesotelioma y el asbestosis, son directa y claramente atribuíbles al contacto con el asbesto. Para otras, tales como el cáncer del tracto gastro-intestinal, la conección causal al contacto con el asbesto parece ser probale, pero no se ha comprabado con certeza aún.

Las enfermedades para las cuales el contacto con el asbesto es una causa generalmente aceptada son la mesotelioma, el asbestosis, la fibrosis de los aeroductos pequeños, la cicatrización, las placas pleurales, la fibrosis pleural, la efusión pleural, y muchos cánceres pulmonares. Las enfermedades para las cuales el contacto con el asbesto no es en este momento una causa generalmente aceptada incluyen los cánceres del riñon, del tracto gastro-intestinal, y de los ovarios.

Cada una de estas enfermedades relacionadas al contacto con el asbesto sólo puede diagnosticarse por examenes y pruebas médicas. Si usted ha tenido contacto con el asbesto, esto no quiere decir que usted, por lo tanto, debe tener, o tendrá una enfermedad causada por el contacto con el asbesto. Pero sí significa que usted debe hacer lo siguiente:

  • cuidar su salud
  • recibir cuidado médico y chequeos con una frecuencia normal, y
  • decirle a su médico que usted ha tenido contacto con el asbesto.
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